El hijo que Felipe IV y la actriz María Calderón tuvieron fue reconocido por su padre oficialmente en 1943, a los trece años. Ser hijo ilegítimo no le impidió desarrollar al máximo sus aptitudes y entretenimientos. Uno de ellos, quizás el menos conocido, fue el de alquimista. Inmerso en una época donde la química empezaba a pedir paso frente a la alquimia, en un proceso de cambios, círculos de aficionados de alta clase social, debates filosóficos y mucha experimentación, se sabe que Juan José de Austria (1629-1679), realizó experimentos químicos en Zaragoza, en el año 1676, una vez que dejó de ser virrey de Aragón. Un declarado enemigo suyo, Juan Everardo Nithard (1607-1681) nos lo presentaba como un apasionado de las quintas esencias y las destilaciones, de los elixires y los alambiques, descuidando sus deberes oficiales:
“Pero el sr. D. Juan tiene más cuidado de los secretos chímicos que de bulgares empresas. De más de 200 víboras sacó […] quinta esencia de sal que tiene notables virtudes, pero con toda su sabiduría y todas sus redomas, aunque las aplicó a librar a Marta Justicia de Aragón [1] del mal de la muerte no lo pudo conseguir. Algunos piensan que S. A. se desayuna con quinta esencia de liebres, gallinas y conejos que le da la vida y le quita de riesgos.” [2]
[1] Se refiere a Miguel Marta y Andrés († 1676), que ejerció el cargo de justicia de Aragón desde 1660 hasta su muerte.
[2] Cartas varias referentes al reinado de Carlos II de España [Manuscrito] Nithard, Juan Everardo 1607-1681, Biblioteca Nacional, ms. 17 482, ff. 71v-72. En el mismo manuscrito se dice que Juan José de Austria opinaba que la verdad estaba en «la Philosophía Chymica» (f. 32v), y que estaba muy «ocupado en ella» (f. 65v).